Reescritos infinitos (2006)
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En medio del dÃa lleno de gracia
la bendición de los frutos que comimos
que hicimos nuestros en nuestros cuerpos
necesitados deseosos de todo tipo de movimiento
acomodándose al ponerse en marcha tan solo
para encontrar ese momento instantáneo
#
en el papel de arroz escrita esa terrible ¿sentencia?
la vida desbordante,
el valor de lo que se pierde
casi sin saber, apenas hoy sospecho
oro de las palabras que sostuvieron el aire de la casa
#
ahora un aire nuevo borra todo,
Fellini-Picasso pintando en la arena
con un palo
leves casi ingrávidos en la lluvia que cae, como la mariposa
posada en los pétalos
de la amapola
el mar
palabras que representan lenguas de un dialecto que pasa por al lado
máscaras de lo que se quiere decir más allá del ruido, todo ese
mundo
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En esa oscuridad casi crepúsculo en donde los pibes de mi barrio seguÃan pegándole a la pelota en su invisibilidad sus cuerpos
fantasmitas que cuentan o aprenden a contar sueños cuentos
chistes; uno llega a la plaza y empieza y a ese se le agrega uno
y otro y escuchan lo que cuenta lo que calla mientras langostas,
langostinos, centollas van a la cacerola
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pero todo el tiempo deliberación decisión consilium todo el
tiempo round a round el cerebro en el gran duelo la voluntad
ganándole por knockout a la razón y rÃase la gente
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Y esa muchacha de pelito rapado sentada sobre el pilar parece
querer morder la luna pero también decir
aun muerta la rosa la rosa no ha muerto
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El cartel de martini seco sà el azul y el rojo cruzados todo el dÃa
ese en el rectángulo vestigios de lo que perturba,
que mi vida sea la del cine y a la salida todavÃa en el aire irreal
casi en el balbuceo misterioso de alguna otra realidad en verdad
y en mentira
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ese romance de entre sus manos donde beben pájaros peces caballos
bebo,
la bella respira un sueño en campos de romeros, tomillos...
se casa miss Mónica W. de trajecito sastre gris, tiran piedras al sol
en esa lenta luz del amanecer en que nadie quiere que amanezca y
queda solo ese zumbido azul escurriéndose como suave masaje
del Reiki.
Jazz (2011)
4
a-
el corazón pesa 400 kilos
si carga la conciencia
de una vida sin ensayos
b-
el miedo escénico de vivir
en un mundo que no escatima sonrisas
se quitan las máscaras los abrigos las últimas palabras
como cavando una tumba
c-
en ese silencio se aguzan los sentidos
los fantasmas regresaron demasiado temprano
parecen preparados a disparar en otro salto
6
a-
cenizas en movimiento todo el dÃa
el sol escondido en los ojos
en un oleaje de espumas de manzanas
puse el pizzicato para el final y vivÃ
en esa misma espuma oyendo al rÃo
en esa narcosis esas ráfagas en el azul el negro
miro y dejo que las cosas sucedan como un Otelo celoso.
b-
allà abajo los cuerpos amados
los tesoros carcomidos por la sal
nuestro tiempo perdido en ese silencio
del jazz
c-
donde mi ojo soltó su lágrima.
10
b-
hundiéndome en un largo silencio a años luz de distancia
me acuerdo de esa chica del colegio
la madonita la llamaban y sus mañanas de invierno
y primaveras y sus mediecitas de colores a rayas por
debajo
de la punta de su delantal su bombachita rosa con
corazoncitos
esa espuma de duraznos esa pared llena de fotografÃas
con su
lunar dorado en las piernas ese rayón otra historia
para vivir escenas perdidas en el gozo en el deseo
con piedras en los zapatos quemando los papeles
las ropas viejas
c-
hechizos de los dÃas y los sentimientos equivocados
toda la tarde Charly Parker y los muertos
en sus placares con sus nieblas sus grietas
en ese ritmo intenso en ese abrazo que quemó el corazón
Partes de la escena (2021)
Sabemos lo que queremos nosotros? Aquà en la habitación que
adoramos estar cuando entra el colorado del atardecer o el
amarillo del medio dÃa en toda esa luz nos bañamos pasando
del living a la cocina tenemos las palabras
los libros este lenguaje que nos hace felices invisibilizados
en lo que hace nacer soñar tanto
en esa luz imaginación del sueño invencible como nuestra
necesidad nuestro deseo
todas esas pequeñas extrañas vidas
que aquà vemos en nuestras vidas que miran para otro lado.
Es ya de noche? esta oscuro negro como esa oscuridad del cine
pero son las 4 de la tarde qué puede ser ¿una gran tormenta? el
mar esta encima de nuestras cabezas el que llegue primero a la
orilla le gritará al otro y el otro sabrá si el dÃa se acortó o es que
pasamos demasiado rápido.
Es que estos árboles que ves me llevan a mi tiempo en el
colegio su oscuridad tal vez o ese verde van más allá de lo que
yo creà recordaba. Una vez un chico como fauno
entre los faunitos volaban las blancas tizas por el aire esa era
la guerra de 2 bandos o de todos contra todos que yo odiaba
porque no me gustaba pelear y sino peleabas te decÃan cagón.
Ah, esa oscuridad de mañana que tan bien conocà a eso de las
6,30 hs el silbido de algún pájaro, la naturaleza despuntando un
nuevo giro y yo en la parada del colectivo, a las 7,30 estarÃa en
la puerta del colegio entre eso que se escucha, voces, ruido de
autos que pasan, todo eso tan lejano que es horizonte.
Un viento de otoño se instaló en este dÃa de febrero
sino fuera por la promesa de 3 o 4 semanas más de calor
agobiante
me pondrÃa el pullover encenderÃa la estufa y me sentarÃa a
contar
los dÃas que me quedan
para volver a ser feliz.
Todo hace sistema las emociones hacen su pilita
acá allá sus montoncitos
que te tiran a sus orillas y te hacen retirar de otras
en el orden del movimiento general
es una curva del cuerpo que busca su equilibrio
en su andar vencido de una forma y no de otra
todo potencia en su tiempo de tolerancia
en el largo recorrido de su blues.
El presente nunca desaparece
subo al colectivo saco uno de diez
me espera alguien en el centro no sé si iremos
al cine o al teatro pero cuando estemos comiendo algo
y dejemos las pistas falsas le diré si quiere seguir
conectado, y dejaremos el mundo entretenido
que cabe en la superficie en ese punto de inflexión
viaje en un hilo
que es el techo de nuestro cordón de vida,
su texto de agua, su sombra arrojada.
Y las cosas van y viene ¿como olas? Es el jubilo de las manos.
Es el arte
que tiene el dÃa y seguimos con tanta ternura.
Todo se mueve y estamos contentos.
Adentro afuera. Sigo las huellas de la gran fi esta. Después
de los artistas. Siguiendo su curso de agua un cielo.
El cántico de los niños o las ranas. Era el mundo pero era agua.
Un estuario. Mirábamos las estrellas. No sabÃamos por donde
comenzar. Todo lo demás era nada comparado con esto.
Me quedo más tranquila cuando me hablas.
Me mostrás tus ojos. Veo su bondad.
Las horas se ponen en su sitio con su beso.
Y dijiste pongo el corazón en todo lo que hago esa es mi
felicidad.
Que no me pase lo que al niño que al subir
al manzano sepa bajar que sepa elegir mi grano feliz.
Esa mi alegrÃa mi diccionario de bolsillo lo Ãnfi mo.
Ahà colgué los cuadros más mÃos.
Pero la lancha pasó rápido haciendo del rÃo
un picadero y nos perdimos en esas preguntas
y vagas respuestas que nos llevaban a nuestra
propia intimidad.
Alcé la linterna para que el tren pasara
y algo naciera y otra muriera.
Las cosas que me hicieron que sea yo en el mundo.
En el interior de mis dimensiones.
Descubrà el primer plano invisible.
Un camino hacia algún lado.
Ni sabemos cuáles son las leyes.
La del caballo muerto en la playa ya la vimos!
Él salÃa al balcón y lo veÃa, bajaba rápido
y lo observaba parecÃa un halcón o un aguilucho.
Levantamos la vista y era la visión
de otra vida. Depende donde uno haga foco
para obtener una realidad? Yo no sé más
de lo que oigo, lo que veo, lo que pienso
ese mosaico es el rayo de luz que entra
por mi ventana. Y a veces crece tanto
que yo no sé, no me puedo contener, me desborda
me parece que todo se rÃe de mÃ.
Está todo tan blanco como si el cielo se nos hubiera
venido encima no sé
si era el Halcón Maltés o el capitán Montalbano,
y andamos y andamos como si pidiésemos permiso
por existir.
Pero hay algo muy profundo que llevo en mÃ.
Hay veces que tengo alas y vuelo,
te tengo cerca y venÃs como una voz,
un ruido, una risa un astro en mÃ. Yo quisiera hablarte.
Y en ese momento
creciente apoyo mi pie
y desaparece como un reflejo en la vereda.
Algo que me dice que estoy acariciando el amor.
En el deseo de besarla. En las palabras que encontré.
Conocà mis genes. Seguà mi camino.
Y me dio sus rubÃes
Si no te lo preguntás no lo vas a saber
porque te quieren robar las palabras que encontraste
que encontramos seguimos por el parque
la noche estaba fresca te di mi sweater
sentà que era mi doble el que estaba allÃ
y mi palabra no era la mÃa
y ahà mi alma escribió.
Amar en esa sombra adelantada entre lo que existe y no existe
arrastrando los pies en sus lindes
recién nacida del milagro de cuánto dura
sigo en su hora unido al cielo
de pasar la vida lamiendo la dicha.
El ritmo del partido la pelota
hacen que no me vaya a pique
no quiero seguir malgastando mis sentimientos
ese es mi óhlele óhlala
mi sombra anónima
mis palabras espejo de mi persona
mis ojos cerrados
Qué cosa pasó?
algo vino algo se fue
hecho de la infancia
que le da cuerda al reloj
En cuál disparate cósmico me encontré
ya fumaba desde los doce y tu vestidito amarillo
en la noche azul del verano
en su desnudamiento nació mi galaxia personal
en esa matriz del aire mucho tiempo
fue mi dueño fue mi condición
yo soy formado por todo eso.
Este hombre ya estará muerto este que va en moto
en la serie de su propia arena
de los 60 que nos encanta ver por televisión
qué amable su mirada su gesto persiguiendo
una forma de la luz por esos caminos mágicos
de mata en mata borrando deslavando nuestro diseño
vulnerable invisible
ese toque ligero cómico con que hemos nacido
no importa qué pasará sino cómo por nuestro
campo de estupor
aquello que no nos deja ver para reconciliarnos
y descubrir el berberisco porque luchamos
su bombÃn y su paraguas el lapsus
como búmeran de fugacidad desbandada
trama bajo las cosas que inventa un tiempo
una llave de entrada
a uno mismo entre una niebla recién leÃda.
Fuera de la fantasÃa y el presentimiento
los planos se encuentran
navegando otra claridad
mi casa de mañana mi tiro perfecto.
Necesitamos tan poco solo flores con dÃas de verano
y un viento azul
ese aire nuestro suelo o plataforma
nuestro camposanto.
Ese espÃritu pleno que fuimos antes de ser hombres
ese rol estelar.
Un buen libro en un dÃa de lluvia. O ir al cine contra
las puertas del dÃa.
Esa será mi música mi zumo a toda hora capaz
de ser a la velocidad de aprender de renunciar.
Ese será nuestro ofi cio.
Y todo se detiene el tiempo sufi ciente
y ahà nace la otra edad en su hora plena deambulo
péndulo oscilo en la pedrada en la caÃda en el centro
de mi duda si no soy yo mismo
en ese dÃa menos ese ocaso que el silencio muerde.
Algo va perdiendo color algo retrocede el amanecer
incendia más allá
lo invisible esa es la contorsión
del mundo dibujado en la expansión
de una estética universal.
Esparcida. Asà lo percibo.
Su fuerza de simplificación.
En el Trocadero vi mi mejor pelÃcula partes de la escena de mi
vida como agradezco los montones que anhelaban que venciera
a mis fantasmas
yo que hacÃa lo que podÃa para vencer la turbulencia de la
batalla con esas chispas atrapadas el problema es ese no saber
lo que falta lo que sobra en uno devenir restaurar un estado de
cólera anterior mudar
en una existencia que se lanza a escena en ese fondo de
torbellino interior a abrir un mundo donde surgen las cosas
esa es la revelación
 de Pablo Queralt){kind=link}
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